A través del miedo he dejado de hacer cosas que disfrutaba y que me hacían feliz. Por miedo no me atrevo a hacer cosas que me encantaría intentar. No he postulado a muchos trabajos por miedo a no tener las competencias necesarias para ser buena en dicho trabajo. He escondido tanto lo que siento, por miedo, que ya poca gente se esfuerza por permanecer a mi lado.
Tratar de romper ese patrón ha sido mi última gran batalla. Y es una importante, porque el miedo me deja en una zona de seguridad que me tiene marcando el paso con una vida que, de no ser por detalles bacanes, es una verdadera mierda. Lo peor es que es así porque de esa forma lo he decidido (fuerte verlo escrito, fuerte reconocerlo).
¿Cómo se enfrenta el miedo? ¿Cuándo aparece el valor necesario para actuar, antes de que la vida se me vaya y solo me quede lamentar lo que no hice?
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