viernes, 27 de septiembre de 2019

Sin título

Llevaba muchas horas con la sensación de que lo vería: la noche anterior había soñado con él; fue de esos sueños que, a una persona normal, le dibujan una sonrisa por todo el día. A mí, me puso muy nerviosa.

Durante el día, no lograba sacarle de mis pensamientos. Recordaba a cada momento esos breves instantes en que estuvimos juntos y me sentía... Diferente. En una noche, hizo que me cuestionara todo lo que creí sentir hasta ese minuto. Solo le tomó unas horas para darme lo que creí que no volvería a tener.

Mientras caminaba, lo vi de lejos. Es de esas personas que es imposible que pasen desapercibidos. Miles de pensamientos cruzaron por mi cabeza. "Háblale", "míralo", "dale una sonrisa", mientras mi corazón latía en forma violenta. Solo pude agachar la cabeza y pretender que no estaba allí. Hasta ahora me pregunto por qué lo hice. Todavía no encuentro la respuesta. Solo me queda esta sensación de tristeza que no se quiere ir de mi lado.

domingo, 1 de septiembre de 2019

Tuve miedo...

Tuve miedo de lo repentino que se volvió todo. De cómo pasaste a ser alguien tan importante para mí en tan poco tiempo. De esa especie de hechizo en que me sentía cada vez que te besaba. Tuve miedo de la voz que, poco a poco y en voz bajita, hacía hablar a mi corazón un idioma diferente.

Temí que aquello no fuese más que un sueño pasajero, un encuentro casual sin más realidad que el presente. Racionalmente, hice lo que tuve a mi alcance para sabotear lo bueno que había llegado. Y lo logré: No quieres nada conmigo.

No sabes cuánto me cuesta controlar el impulso de saber de ti, preguntarte cómo estás o, simplemente, volver a mirarte como alguna vez lo hice: ver tus ojos pequeños llenos de curiosidad, que trataban de adivinar qué había detrás de los muros que construí para evitar sentir dolor. 

Sé, con la certeza que me da la experiencia, de que este embrujo se alejará de mí. Mientras menos sepa de ti, más sencillo será. 

No quiero imaginar qué pasará por tu cabeza respecto a mí. Lo más probable es que ya no me recuerdes.